Estados Unidos. Walgreens paga 80 millones por la falta de control en la venta de medicamentos

La cadena de droguerías no informó a las autoridades del desvío en las ventas de analgésicos

11 de junio. Walgreens, la mayor cadena de droguerías de Estados Unidos, acordó hoy pagar 80 millones de dólares en concepto de sanción civil para resolver las acusaciones de negligencia al permitir que sustancias sometidas a control como la oxicodona y otros analgésicos de prescripción se desviasen al mercado negro.

Mark R. Trouville, el agente especial responsable del área de Cumplimiento del Medicamento de Estados Unidos en Miami, dijo que el acuerdo fija acciones administrativas y sanciones penales al centro de distribución Jupiter de Walgreens y seis farmacias de la cadena, investigadas en Colorado, Michigan y Nueva York.

El acuerdo, el mayor en la historia de la DEA, resuelve los cargos de que la compañía cometió un número sin precedentes en el mantenimiento de registros y dispensaciones de violaciones. El centro de distribución de Walgreens en Jupiter era el mayor distribuidor de oxicodona a las farmacias en Florida.

"Las cadenas farmacéuticas nacionales no están exentas de cumplir la ley. Este acuerdo supone un claro mensaje de que todos los solicitantes registrados por la DEA tendrán que rendir cuentas cuando violan la ley y amenazan la salud pública y la seguridad", señala Trouville. "La DEA continuará sus esfuerzos para trabajar con nuestros registrados y nuestros socios para aplicar la ley para combatir el abuso y desvío de medicamentos en Florida".

El acuerdo cubre las acusaciones de que el centro de distribución Jupiter no cumplió con la normativa que requiere informar a la DEA de órdenes sospechosas de prescripción de medicamentos procedentes de las farmacias de Walgreens. La multinacional omitió su deber de informar sobre órdenes sospechosas que eran una práctica sistemática que resultó en al menos miles de violaciones y permitió a las farmacias de Walgreens solicitar y recibir al menos tres veces la media de medicamentos de Florida como la oxicodona.

Trouville también señaló que seis farmacias en Florida que recibieron el envío de medicamentos sospechosos procedentes del centro de distribución Jupiter rellenaron las recetas de los clientes que sabían o deberían haber sabido que no estaban autorizadas para uso médico.  Además, estas farmacias y otras en Estados Unidos no identificaron correctamente y marcaron, como requiere la DEA, impresas las recetas de sustancias controladas. Sin esta identificación, la DEA no puede determinar con precisión los registros de medicamentos dispensados en farmacias.

Además de la sanción de 80 millones de dólares, el arreglo civil revoca la capacidad de la compañía de distribuir o dispensar sustancias controladas durante dos años, hasta 2014. Walgreens admite también que no cumplió con sus obligaciones con el registro de la DEA y acordó crear un Departamento de Integridad Farmacéutica para asegurar el cumplimiento de la regulación y prevenir el desvío de sustancias controladas.  

Fuente: The Washington Times