El COFM espera que la factura sanitaria informativa mejore la adherencia en los tratamientos

Madrid implica a la población en el conocimimiento del gasto sanitario

Madrid, 13 de septiembre. La entrega de la factura sanitaria informativa a los pacientes atendidos por el Servicio Madrileño de Salud es un acierto y generará grandes beneficios para la sanidad madrileña y también para la salud de los pacientes, según el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM).

La iniciativa anunciada ayer por el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, contribuirá a generar un mayor conocimiento de los ciudadanos sobre el coste de la asistencia sanitaria recibida, lo que, sin duda, redundará en el uso más eficiente de los recursos y también en la mejor adherencia a los tratamientos.

Desde que la Consejería de Sanidad presentó el proyecto al COFM, los farmacéuticos madrileños han apoyado la medida al entender que se trata de un primer paso para implicar a los ciudadanos en el gran reto que supone el autocuidado de la salud y el uso racional de los recursos públicos.

La extensión del modelo de información de los costes sanitarios ha de generar en el ciudadano una mayor responsabilidad y conciencia de los servicios que reciben y, por ende, de los medicamentos que se financian a través de receta pública dispensada a cargo del Sistema Nacional de Salud, así como de los medicamentos dispensados en hospitales.

Para el presidente del COFM, Alberto García Romero, "la medida es muy positiva porque acaba con esa percepción errónea tan extendida de que la Sanidad es gratuita. Además, esperamos que con la información se mejore también la adherencia a los tratamientos con medicamentos y se reduzca el elevado número de medicinas sin utilizar que se depositan en las farmacias, uno de los principales retos de la Sanidad española".

Los usuarios que reciban esta factura informativia recibirán un texto explicativo que hará hincapié en el estricto objetivo informativo del documento. La medida, que ya se ha puesto en marcha en Andalucía y en la Comunidad Valenciana, se acordó en el Pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, de 18 de marzo de 2010.