Italia endurece la planificación territorial de los establecimientos de venta de OTC

Un total de 3.000 parafarmacias abrieron en los últimos tres años

Roma, 1 de noviembre. La venta de medicamentos OTC en Italia estará sujeta a una regulación más estricta. Si hace unos años se permitió que un número de principios activos se vendiesen en establecimientos no farmacéuticos, ahora se reforzarán los requisitos de planificación para todos los establecimientos de parafarmacia, que serán análogos a las farmacias.

En el verano de 2006, el entonces ministro de desarrollo económico Pier Luigi Bersani levantó la prohibición de la venta de medicamentos OTC fuera de las farmacias. Antes, la cadena minorista Coop había recogido 300.000 firmas con este objetivo. Los farmacéuticos protestaron y se echaron a la calle en Roma.

Ahora el Gobierno quiere revertir esta liberalización, al menos parcialmente. La Administración Berlusconi ha hecho varios intentos desde 2007, de momento sin éxito. Hasta siete normas apuntan a la vuelta a la regulación del mercado de OTC. La ley 2079 recibió finalmente la aprobación del Parlamento a finales de marzo.

Según esta norma, la apertura de nuevos establecimientos de venta de OTC tendrá que ajustarse a restricciones demográficas estrictas sobre la libertad de establecimiento de farmacias. El objetivo es prevenir las grandes fluctuaciones de estos comercios. La apertura de muchas parafarmacias, especialmente en las grandes ciudades, ha disparado el número de quiebras.

La Autoridad de la Competencia italiana se opone a los planes de regulación del Gobierno y en una carta instó a los miembros del Senado a votar en contra de la norma. La nueva regulación influenciaría negativamente y debilitaría el mercado que ha sido liberalizado recientemente, resultando en un incremento de los costes para los ciudadanos.

La Federación Nacional de Farmacéuticos (Federfarma) rechaza las críticas: "Detrás de estos nuevos modelos de negocio hay intereses que de ningún modo se centran en la salud de los ciudadanos", asegura la presidenta Annarosa Racca. Andrea Mandelli, presidente de la Federación de Farmacéuticos Italianos (FOFI), también se mostró escéptico: "El Tribunal de Justicia de la UE ha dejado claro que los medicamentos no son mercancías ordinarias y que su distribución debería no estar regulada por mecanismos normales de mercado".

Un total de 3.000 parafarmacias abrieron en los últimos tres años, 1.700 el año pasado. Además, cerca de 260 supermercados italianos han creado por ahora unidades de dispensación "corner de la salud". Las ventas actuales de la industria alcanzan los 150 millones de euros.

Un problema para muchos establecimientos de ventas de OTC es que requieren la presencia de un farmacéutico. Así, hace tres años, los propietarios intentaron obtener permiso para vender también medicamentos con receta no cubierta por la seguridad social, incluyendo algunos narcóticos, analgésicos y sedantes.

Fuente: Pharma Adhoc