Janet Morrison: “Los ciudadanos quieren y esperan recibir más servicios de su farmacia local en el futuro”

Madrid, 24 de mayo de 2023. Pharmacy first. El Gobierno inglés invertirá 645 millones de libras (745 millones de euros) para que los farmacéuticos comunitarios indiquen medicamentos de prescripción en siete afecciones comunes sin necesidad de receta médica y profundicen en la estrategia de detección de casos de hipertensión, entre otros servicios. Janet Morrison, directora ejecutiva del Comité de Negociación de Servicios Farmacéuticos (PSNC, en sus siglas en inglés) explica a Digital Farmadrid el alcance de un plan millonario que supone uno de los grandes avances profesionales registrados en Europa, y cuenta cómo se ha fraguado, como responsable del organismo encargado de planificar, configurar y negociar la financiación pública de los servicios del NHS que presta la red de farmacias comunitarias en Inglaterra.

¿Por qué el Gobierno inglés ha decidido en este momento apostar tan fuerte por los farmacéuticos? ¿Cómo ha influido la experiencia registrada durante la pandemia, donde asumieron nuevas funciones en vacunación y diagnóstico, entre otras competencias, o la difícil situación que atraviesa el sistema de salud por la presión asistencial y la falta de profesionales?

Los desafíos que tienen los pacientes para acceder a los médicos de cabecera en Inglaterra son significativos y se han convertido en un asunto político. La farmacia comunitaria ofrece una de las pocas soluciones para ayudar a abordar estos problemas, por lo que llevamos a cabo una campaña de influencia durante muchos meses para promover este mensaje, generar apoyos en el Parlamento y crear conciencia en los medios de comunicación, además de tratar de persuadir a las autoridades sanitarias con nuestras propuestas y estudios.
El desempeño de las farmacias durante la pandemia, su accesibilidad y su voluntad de ayudar a los pacientes con una amplia gama de necesidades de atención médica ciertamente nos ayudaron a construir ese escenario.

En España se ha llamado la atención sobre el hecho de que los farmacéuticos puedan 'recetar' medicamentos que requieren prescripción médica para enfermedades comunes. ¿En qué casos y enfermedades están autorizados y cuándo se implementarán? ¿Se requerirá formación previa y protocolos de actuación? ¿Se comunicará al médico o se hará constar en la tarjeta sanitaria del paciente?

El Gobierno y el NHS han anunciado que el Servicio de Afecciones Comunes cubrirá siete dolencias: sinusitis, dolor de garganta, dolor de oído, picadura infectada de insectos, impétigo, herpes zóster e infecciones del tracto urinario sin complicaciones en mujeres. Sin embargo, aún no se ha negociado el detalle más amplio del servicio.

Para empezar, el servicio utilizará Indicaciones para grupos de pacientes (PGD). Los PGD brindan un marco legal que permite a los farmacéuticos (como profesionales de la salud registrados) suministrar medicamentos específicos a un grupo predefinido de pacientes, sin que tengan que ver a un prescriptor.

Se acordarán más detalles durante nuestras negociaciones con el Departamento de Salud y Atención Social (DHSC) y el NHS de Inglaterra (NHSE). Nuestra ambición es tener más información para compartir con los propietarios de farmacias durante el verano. El DHSC y NHSE han dicho que desean tener el servicio en funcionamiento para finales de 2023.

En términos de resistencia a los antimicrobianos, los farmacéuticos comprenden los riesgos y han contribuido activamente a los esfuerzos para detener la resistencia a los antimicrobianos durante varios años a través de su Programa de calidad. Sobre el intercambio de información, ya contamos con acuerdos de intercambio de datos con el médico general para las vacunas contra la gripe, y estos acuerdos se mejorarán aún más con el trabajo para dar a las farmacias acceso a partes del historial del paciente del médico de cabecera y también la capacidad de agregar información sobre los medicamentos que hemos dispensado y las consultas que hemos facilitado.

¿Cómo se financiará esta ampliación de competencias?

El Gobierno ha prometido nuevos fondos en su Plan de recuperación del acceso a la atención primaria, que incluye 645 millones de libras esterlinas para farmacias comunitarias. Todo esto es dinero nuevo, es decir, aparte de la financiación básica anual de 2.592 millones de libras esterlinas para las farmacias comunitarias en Inglaterra. Sin embargo, parte de esta financiación está destinada a respaldar el trabajo para desarrollar otros dos servicios preexistentes (los servicios de anticoncepción de farmacia del NHS y los servicios de detección de casos de hipertensión del NHS), así como el coste de la integración de tecnologías de la información y la comercialización de los servicios de farmacia al público.

También debemos asegurarnos de que los fondos se asignen de manera adecuada y que el servicio para apoyar las afecciones comunes se comisione de una manera que facilite su implementación por parte de los equipos de farmacia y que la prestación del servicio se ajuste bien a los procesos farmacéuticos existentes.

Finalmente, ¿cómo han aceptado los pacientes y también los médicos y enfermeras la posibilidad de que el farmacéutico sea quien prescriba y dispense un tratamiento para una patología común?

El nuevo servicio aumentará el trabajo que los equipos de farmacia han estado haciendo durante algún tiempo, por ejemplo, a través del Servicio de Consulta de Farmacéuticos Comunitarios (CPCS), o por rutas menos formales cuando los ciudadanos se acercan para pedir consejos de atención médica. El público ya tiene una visión ampliamente positiva de la farmacia, particularmente después de la pandemia, y sabemos por el trabajo de las encuestas que agradecerían un servicio Pharmacy First. Creemos que los ciudadanos aquí quieren, y esperan, recibir más servicios de su farmacia local en el futuro.

En términos de otros profesionales de la salud, buscamos el apoyo de los médicos de cabecera el año pasado cuando presentamos nuestra primera oferta por un servicio Pharmacy First totalmente financiado y, dadas las presiones sobre la práctica general, obtuvimos el apoyo de sus negociadores nacionales. Un pequeño número de médicos de cabecera han expresado su preocupación sobre los riesgos potenciales relacionados con la administración de antimicrobianos, pero continuaremos trabajando para abordar los conceptos erróneos sobre la experiencia de los farmacéuticos y la dispensación de antibióticos. Pero, de manera más general, el servicio es parte de una estrategia en curso para aumentar la provisión de servicios de farmacia más centrados en la clínica, que apoyan a los pacientes y también formaliza la relación de trabajo colaborativo.

Juan Marqués