Alemania. Las farmacias piden una compensación por su gestión de los desabastecimientos  

Berlín, 28 de febrero. Lejos de solucionarse, se agravan los continuos cuellos de botella en el suministro de medicamentos en Alemania. Ante esta situación, las farmacias solicitan un mayor margen de decisión a la hora de dispensar medicamentos en stock y una compensación económica adecuada por los cuellos de botella como recompensa por el esfuerzo realizado.

Otra medida planteada por el sector es permitir que las farmacias preparen sus propias recetas en caso de emergencia. La ABDA -Unión Federal de Asociaciones de Farmacéuticos Alemanes- hace estas sugerencias en su comunicado sobre el proyecto de ley para combatir y mejorar el suministro de medicamentos (ALBVVG). Los farmacéuticos criticaron duramente el documento presentado por el Ministerio Federal de Salud ya que, desde el punto de vista de ABDA, no aborda el problema de los cuellos de botella en el suministro y, por lo tanto, tampoco asegura el suministro de medicamentos a la población.

“Estamos satisfechos de que los políticos finalmente estén prestando atención a los cuellos de botella por falta de medicamentos. Sin embargo, el proyecto de ley presentado no es adecuado para resolver el problema de una forma cómoda y confiable para el paciente", afirma la presidenta de ABDA, Gabriele Regina Overwiening. "Falta un margen de decisión que permita a las farmacias mantener el suministro de la población con seguridad jurídica, como ha sido el caso en los últimos años durante la pandemia. El proyecto de ley ni siquiera se acerca a tener en cuenta los elevados costes de personal. Aquí se necesitan mejoras con urgencia”, asegura.

Overwiening continúa: “Durante la pandemia, las farmacias han demostrado repetidamente que pueden garantizar el acceso a los medicamentos a la población, incluso en condiciones extremas. Para las farmacias, son absolutamente necesarias unas condiciones marco claras, una mayor libertad de movimiento y una compensación de cuello de botella adecuada por el esfuerzo adicional”.

Incluso con estimaciones conservadoras, se requieren al menos seis horas por semana por farmacia para gestionar los cuellos de botella en la entrega. El esfuerzo horario total por año en las 18.000 farmacias es de 5,62 millones de horas. Con costes laborales totales para el personal farmacéutico de 75,91 euros/hora, esto da como resultado unos costes de 425 millones euros al año. Con cerca de 20 millones de casos al año en los que las oficinas de farmacia tienen que documentar una llamada no disponibilidad, existe un recargo de 21 euros que la ABDA exige por cada cambio.

Fuente: ABDA