Inglaterra. Miles de farmacias en riesgo de cierre por la inflación  

Londres, 27 de septiembre. “Los cierres impedirían el suministro de medicamentos, amenazarían la seguridad del tratamiento y reducirían las oportunidades para una mejor atención del NHS”, advierten dos investigadores del University College London (UCL) y la London School of Economics (LSE) en un informe publicado el 27 de septiembre.

El número de cierres de farmacias podría ser del orden de 3.000 oficinas en 2024, según una estimación compartida por el profesor emérito de política farmacéutica y de salud pública de la UCL, David Taylor, en una rueda de prensa para presentar el informe encargado por la Asociación Nacional de Farmacias (NPA, en sus siglas en inglés).

El profesor Taylor señaló que los cierres representan una "crisis grave" y "una amenaza existencial para la farmacia comunitaria del NHS en Inglaterra", ya que las farmacias que atienden a los más vulnerables están "en peligro especial".

El profesor Taylor y el profesor asociado de política sanitaria internacional de la LSE, Panos Kanavos, apuntan que los cierres “serán el resultado de políticas que no han estado sujetas a un escrutinio informado más allá de círculos muy limitados… y bien podrían haber sido rechazadas si hubiera sido entendido adecuadamente”. 

“Sin compensación por inflación” 

La financiación de las farmacias comunitarias en Inglaterra se ha congelado en 2.592 millones de libras esterlinas al año desde 2017, "sin asignación anual para la inflación", escriben el profesor Taylor y el doctor Kanavos.

Si una tasa de inflación del 10% o superior se extiende hasta 2024, año en el que finaliza el Marco contractual de farmacia comunitaria actual (CPCF, en sus siglas en inglés), el valor de la suma global de la farmacia comunitaria habrá caído de 2.500 millones de libras esterlinas a cerca de 1.700 millones de libras esterlinas. Esto significa que la red de farmacias en Inglaterra habrá experimentado una pérdida "en términos reales" de 800 millones de libras esterlinas para 2024. “Sería casi un 40% por debajo del valor de 2015 y un 29% por debajo de su valor de 2019”, avisan los académicos. 

Para el año en curso, el valor de la suma global inglesa se ha reducido en 2.100 millones de libras esterlinas, el 76% de su valor de 2015.
 
Si bien el informe reconoce que el resultado del acuerdo de financiación del CPCF la semana pasada permitió retener 100 millones de libras esterlinas de un "pago en exceso" de una compra anterior de medicamentos, "no se ha tomado ninguna medida para abordar el problema financiero subyacente". Los recursos necesarios para mantener la red de farmacias son "modestos" en comparación con el resto del NHS, argumentaron los investigadores.

Pero la situación de "emergencia" del sector causada por los recortes de fondos y el impacto de la inflación aún no se ha abordado, según señalan. Incluso si, por ejemplo, se inyectaran 250 millones de libras adicionales en el contrato de farmacia para 2023 y 2024, “los desembolsos anuales generales en efectivo en la remuneración de farmacias comunitarias en Inglaterra seguirían siendo prácticamente los mismos que en 2015”, agregaron.

Las políticas de farmacia comunitaria en otras partes del Reino Unido han “progresado sin la falta de armonía que se observa en Inglaterra”, según el informe. Iniciativas como Pharmacy First Plus de Escocia, que permite a los farmacéuticos prescriptores tratar una amplia gama de afecciones comunes, y el progreso en Gales hacia la reducción de la proporción de tarifas de farmacia derivadas de la dispensación, “promete una mayor estabilidad financiera y una mejor atención primaria”, escribieron.

Si bien se estima que la financiación de las farmacias en Inglaterra es de 46 libras esterlinas por habitante, el profesor Taylor y el doctor Kanavos dijeron que las cifras equivalentes para Gales y Escocia son 66 libras esterlinas y 67 libras esterlinas, respectivamente.

Las cifras más altas para Gales y Escocia plantean "preocupaciones importantes sobre los diferentes objetivos de política que se persiguen, los estándares de servicio y los intereses contrapuestos de los pacientes y la salud pública en juego", agregan. 

Sin embargo, el informe identifica "razones para el optimismo a largo plazo", señalando el compromiso del Consejo General Farmacéutico de garantizar que todos los nuevos graduados de farmacia califiquen como prescriptores independientes para 2026.

“Los responsables de la formulación de políticas deberían buscar con urgencia permitir que los farmacéuticos comunitarios se conviertan en proveedores de atención médica clínicamente orientados en todo el Reino Unido”, escribieron. "Dicho progreso debe fomentarse de una manera que también les permita ejecutar sus responsabilidades de dispensación y suministro de medicamentos relacionados de la manera que mejor satisfaga los requisitos de los usuarios del NHS".

El profesor Taylor agregó que aumentar el número de farmacéuticos prescriptores proporcionará "una mayor comodidad", "reducirá los tiempos de espera" y "en algunos casos, mejorará fundamentalmente la atención clínica, además de aliviar la presión sobre las prácticas generales". Las respuestas a la pandemia de COVID-19 también han demostrado el valor de la farmacia comunitaria en todo el Reino Unido, concluyó el informe.

Fuente: C+D