Londres, 26 de agosto. El nuevo acuerdo de financiación de la farmacia inglesa promoverá más la dispensación de servicios clínicos que la dispensación, si bien los fondos destinados se mantendrán en los 2.592 millones de libras al año durante los próximos cinco años, según el nuevo marco contractual de la farmacia para el periodo 2019-2024.
El acuerdo finaliza las negociaciones que comenzaron el pasado mes de abril entre el Comité de Negociación de Servicios Farmacéuticos (PSNC, en sus siglas en inglés), el Servicio Nacional de Salud inglés y el Departamento de Salud y Atención Social (DH, en sus siglas en inglés).
El documento final recoge cambios en los servicios profesionales desarrollados hasta ahora, como la modificación de la actual revisión del uso de los medicamentos (MUR, en sus siglas en inglés), el programa de farmacia de vida saludable y el servicio de síntomas menores, además de la financiación de la incorporación de la Directiva de Medicamentos Falsificados y un contrato multianual para ofrecer a los contratistas certidumbre para el futuro, entre otras sorpresas más.
Mientras la cantidad global se mantiene en los 2.592 millones de libras al año hasta 2024, la distribución de estos fondos se negociará cada ejercicio. El PSNC señala que "estos significa que gran parte del detalle, especialmente para los últimos años del acuerdo, está todavía por concretarse".
El Gobierno espera que el nivel de financiación de la dispensación se reducirá en el curso de los cinco años, por una cantidad que no está todavía acordada, "conforme la nueva tecnología y transformación se habiliten". Cualquier fondo se destinará a una mayor prestación de servicios, subraya.
El balance entre el gasto en dispensación y nuevos servicios se revisará y negociará cada año, explica el DH, para ayudar a "crear la capacidad y financiación necesarias para ofrecer la más amplia prestación de servicios".
Los pagos del establecimiento se eliminarán por completo, según el anuncio del gobierno en 2016. Si para 2018-2019 se asignó un total de 164 millones de libras de la suma global para este fin, se reduce a 123 millones de libras en 2019-20, señala el DH. La fecha de finalización de estos pagos aún no se ha decidido, y aunque algunas farmacias aún pueden recibir fondos en 2020-21, "definitivamente se suprimirán para 2021-22", admite el DH.
En su informe sobre el acuerdo, el PSNC señala que el dinero se reinvertirá en la prestación de servicios, aunque reconoce que ofrecer estos servicios aumentará la carga de trabajo de las farmacias.
En reconocimiento de que el NHS Inglaterra "no considera que los MUR ofrezcan una buena relación calidad-precio", el servicio será dado de baja en abril de 2021. Las farmacias solo pueden recibir el pago por 250 revisiones llevadas a cabo en este año financiero y 100 por el siguiente. Los MUR serán reemplazados por revisiones estructuradas de medicamentos que, según se afirma, son "clínicamente más efectivas para los pacientes". Estos no serán llevados a cabo por farmacéuticos de oficina de farmacia, sino por farmacéuticos "clínicos" que trabajan en redes de atención primaria (PCN). La financiación se "reciclará" en el contrato de financiación para pagar otros servicios nuevos.
En 2020-2021, un servicio de conciliación de medicamentos se introducirá en las farmacias -sin mención de financiación- "para asegurar que los cambios de tratamiento hechos en la atención especializada se incorporan de forma apropiada cuando el paciente es dado de alta y es atendido en la oficina de farmacia", apunta el DH.
El Departamento de Salud también se propone ampliar el nuevo servicio de medicamento (NMS) en los próximos cinco años para incluir nuevas condiciones. Por ejemplo, el PSNC quiere añadir antidepresivos al servicio.
Fuente: C+D
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Portada Nº 157En reconocimiento de que el NHS Inglaterra "no considera que los MUR ofrezcan una buena relación calidad-precio", el servicio será dado de baja en abril de 2021. Las farmacias solo pueden recibir el pago por 250 revisiones llevadas a cabo en este año financiero y 100 por el siguiente. Los MUR serán reemplazados por revisiones estructuradas de medicamentos que, según se afirma, son "clínicamente más efectivas para los pacientes". Estos no serán llevados a cabo por farmacéuticos de oficina de farmacia, sino por farmacéuticos "clínicos" que trabajan en redes de atención primaria (PCN). La financiación se "reciclará" en el contrato de financiación para pagar otros servicios nuevos.
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