Madrid, 25 de mayo. El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM), Alberto García Romero, cargó ayer contra las últimas medidas recogidas en el Real Decreto-ley 8/2010 de medidas extraordinarias para reducir el déficit público al considerarlas un "expolio por inequitativas y por reiteradas en el tiempo a un sector que aporta algo más a la sanidad de lo que recibe".
Durante la presentación del estudio "Futuro de la Oficina de Farmacia: 2010-2014" promovido por el COFM, García Romero recordó que el Gobierno ha aprobado en cinco meses cuatro medidas diferentes contra la farmacia que se traducen en un "recorte insostenible" de las ventas y el beneficio de un sector que "ya ha tocado fondo". Y es que el descuento impuesto del 7,5 por ciento sobre las ventas de medicamentos erosiona aún más el beneficio neto antes de impuestos, que se situaba en el 9,4 por ciento en 2008 y que podría caer hasta el 7,7 por ciento en 2014 si no se corrige el actual sistema de deducciones por el que la farmacia contribuyó con 623 millones de euros a la sostenibilidad del sistema público en 2009.
Para frenar el continuo deterioro de los márgenes de la farmacia española, el presidente del COFM reclamó un porcentaje fijo de aportaciones y descuentos hacia el futuro, "algo que no se garantiza en este momento y que para nosotros se va a convertir en el caballo de batalla de futuras negociaciones, para cuando se supere la situación de crisis que padece nuestro país".
Sin embargo, las medidas de urgencia aprobadas por el Gobierno "van en la dirección contraria" y son "un error de bulto", a juicio del responsable del COFM, ya que actúan exclusivamente sobre los precios sin abordar la demanda de medicamentos. A este respecto, García Romero señaló que el consumo de medicamentos "no lleva un patrón lógico en nuestro país", ya que el número de recetas ha aumentado un 56 por ciento desde 2000, mientras que el número de unidades consumidas en todo el mercado sólo lo ha hecho en un 23 por ciento, por lo que "no se consumen más medicamentos, sino que los que se consumen se hacen cada vez más en el sistema público".
Por ello, las soluciones para dar sostenibilidad al sistema en opinión del COFM pasan por controlar el número de recetas, excluir de la financiación determinados medicamentos de bajo precio o de amplio uso en síndromes menores y abrir el debate del copago, ya que "si el Gobierno hubiese seguido esa vía en una proporción modesta por receta podría haber ahorrado tanto como lo que va a conseguir por medio de los dos Reales Decretos Leyes, sin amenazar un solo puesto de trabajo, ni la calidad del servicio", advirtió García Romero.
Por su parte, el ex consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Manuel Lamela, que fue el experto encargado de presentar las conclusiones del estudio, criticó las últimas medidas adoptadas por el Gobierno al señalar que "ponen en riesgo el modelo de oficina de farmacia". En su opinión, "no es el momento de disparar contra un subsector como la farmacia, sino de sentarse a negociar un escenario estable que garantice una rentabilidad mínima del sector". Para Lamela, "la mayor parte de las oficinas de farmacia se encontrarán en una situación extremadamente crítica en 2014" si no se corrige la tendencia actual y alertó de que se puede producir por vez primera "el cierre real de farmacias en España".
Índice
Portada Nº 39Aviso legal | Política de Cookies
Copyright © 2024.
Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid.