Inglaterra. El NICE recomienda los test de VIH en farmacia

Los farmacéuticos pueden reducir el número de casos no diagnosticados en zonas de alta prevalencia, según una nueva guía del Instituto Nacional para la Salud y la Excelencia Clínica

Londres, 6 de diciembre. Se calcula que en el Reino Unido hay 101.200 personas enfermos de VIH en 2015. De ellos, más de 13.500 -uno de cada ocho- viven con la infección no diagnosticada.

Para mejorar el diagnóstico en áreas de alta y muy alta prevalencia, el Instituto Nacional para la Salud y la Excelencia Clínica (NICE) recomienda ofrecer test de VIH a todas las personas que no han sido diagnosticadas con VIH que se den cita en la consulta médica o se hagan un análisis de sangres.

La guía señala que los test de VIH deberían estar disponibles en centros comunitarios, como farmacias; centros voluntarios, como los grupos religiosos; y lugares donde se producen comportamientos de alto riesgo sexual, incluidos clubs nocturnos, saunas y festivales de música.

En áreas donde la prevalencia de VIH es extremadamente alta, las personas que no han sido diagnosticadas con la infección deberían someterse a la prueba en su ingreso en hospitales, incluyendo las visitas al departamento de A&E, incluso si no tienen análisis de sangre, recoge la guía.

Se consideran zonas de prevalencia ‘extremadamente alta' las que registran cinco o más infecciones diagnosticadas por cada 1.000 personas entre 15 y 59 años, criterio que cumplen 20 de las 152 áreas de salud local en Inglaterra. La ‘Alta prevalencia' se reduce a 2-5 casos diagnosticados por 1.000 habitantes entre 15-59 años, con 54 áreas de salud local que cumplen estos parámetros.

La guía añade que el uso de kits de prueba de uso domiciliario supone "una gran promesa, especialmente como medio de implicar a las personas que son más reacias a presentarse en los centros de salud", y recomienda que se indiquen para las personas que rechazan los test.

Sandra Gidley, presidenta de la Real Sociedad Farmacéutica de Farmacia Inglesa, considera que "las personas infectadas con VIH pero que no son conscientes de su status tendrán resultados más pobres en salud y es más probable que contagien a otros. La detección precoz de la enfermedad es una función clave de la práctica de los farmacéuticos y los test en farmacia de VIH en poblaciones de alto riesgo pueden ser una gran contribución para mejorar los resultados de los pacientes". Gidley añade que "facilitar los test en las farmacias también da la oportunidad de detectar VIH en personas que no quieren visitar un centro o especialista de salud sexual, pero debe recordarse que someterse a un test debería estar siempre acompañado con un consejo o señalización apropiadas".

Fuente: The Pharmaceutical Journal